Un petirrojo anillado en el centro-oeste de Francia llega hasta el Humedal del Bolue

- Hasta la fecha, son más de 30 los registros de pájaros que, o bien han sido recuperados en Bolue o bien han sido anillados aquí y recuperados posteriormente en otras estaciones de Europa.
- Los ejemplares anillados en otros lugares de Europa y controlados posteriormente en Bolue son aún más numerosos: carricero común, petirrojo, pájaro moscón, martín pescador, golondrina…
- La Estación del humedal de Bolue es una de las más antiguas de Euskal Herria y tiene como objetivo prioritario aportar datos sobre la avifauna para que puedan ser utilizados en la gestión integral del propio humedal.
Una de las redes de la Estación de Anillamiento del humedal de Bolue ha capturado, recientemente, un ejemplar de petirrojo que portaba una anilla diferente a las que se suelen colocar en dicho punto. Al analizarla y consultarla, técnicos medioambientales comprobaron que había sido anillado en noviembre del año pasado en un pequeño humedal de Sainte-Soline, un pueblo localizado en la región de Poitou-Charentes, en el centro-oeste de Francia, junto a la costa atlántica.
Hasta la fecha, son más de 30 los registros de pájaros que o bien han sido recuperados en Bolue o bien han sido anillados aquí y recuperados posteriormente en otras estaciones. Entre estos últimos podríamos destacar a los carricerines comunes, por estar incluidos en el Catálogo Vasco de Especies Amenazadas. Así, algunos ejemplares de esta especie anillados en Bolue han sido recuperados tiempo después, meses e incluso años más tarde, en estaciones localizadas en lugares tan dispares como Treogat (en la Bretaña francesa), en Teifi Marshes (uno de los mejores humedales de Gales), en Zeebrugge y Glabbeek (Bélgica) o más cercanos como la estación de anillamiento del Urdaibai Bird Center en Gautegiz-Arteaga. Otras especies, como una pequeña curruca capirotada aparecía un mes después de su anillamiento en Eisenberg (Alemania); o un martín pescador y un carbonero común aparecían muertos en Berango y Leioa, respectivamente. Se conocía su identidad gracias a la anilla que portaban.
Los ejemplares anillados en otros lugares y controlados posteriormente en Bolue son aún más numerosos. Así, se han encontrado petirrojos procedentes de la Isla Greifswalder (Alemania), un pájaro moscón de Chenac-Saint-Seurin-D´Uzet (Francia), un mosquitero común de Ponteceso (A Coruña), un martín pescador de Juslibol (Zaragoza), golondrinas de Gautegiz-Arteaga, en la reserva de Urdaibai, y Tor Paterno (Roma, Italia). Aunque los más numerosos, de nuevo, son los carriceros comunes, con ejemplares procedentes de Bélgica (5), Países Bajos (1), Suecia (1), República Checa (1) y Cantabria (1).
Por otra parte, recordar que en noviembre de 2021 fue recapturada una hembra de Cetia ruiseñor con más de 9 años de edad, que había sido anillada en la propia estación de Bolue en julio de 2012, lo que le hacía el ejemplar de esta especie más longevo de la Península Ibérica y segundo del mundo.
Las Estaciones de Anillamiento de Esfuerzo Constante, que están localizadas en muchos y variados lugares de Europa, son muy importantes para el conocimiento y conservación de las aves, tanto sedentarias como migradoras, así como para la gestión de sus poblaciones, tanto a nivel local como global. La Estación del humedal de Bolue es una de las más antiguas de Euskal Herria y tiene como objetivo prioritario aportar datos sobre la avifauna para que puedan ser utilizados, junto a otro tipo de datos, en la gestión integral del propio humedal. No obstante, su aporte al conocimiento de las aves tiene un carácter también global ya que algunos individuos anillados son recapturados en otros lugares y viceversa, lo que permite conocer sus rutas migratorias y, aún más importante, sus lugares de descanso y avituallamiento durante estos desplazamientos, fundamentales para su conservación.
“Durante los últimos años, se han venido llevando a cabo diversas actividades enfocadas al conocimiento y gestión de la fauna silvestre de Getxo. Al tratarse de un hábitat excepcional para aves, es fundamental llevar a cabo los pertinentes censos de población, tanto anuales como estacionales. La comparación de estos datos nos sirve para controlar el uso de los diferentes espacios del medio natural de Getxo y su importancia en sus rutas migratorias. Es por ello por lo que con pequeñas acciones se puede incrementar la biodiversidad, fomentando actividades de ciencia ciudadana”, ha explicado el concejal del Servicio municipal de Medio Ambiente, Iñigo Urkitza
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